A Manuela, mi madre
-Jean Luca -me dijo Francesca-, soy tan feliz que gritaría desde la raíz del alma.
-No te contengas. ¡No creo que molestemos a los gladiadores!
Francesca abrevió el paso, acunó con ambas manos sus mejillas, depositó su mirada huidiza en el recoveco de una grieta antigua; serpenteaba una idea por su mente:
-Para celebrarlo deberíamos recoger al piccolo Paolo, tomar un taxi hasta el Aeroporto Leonardo da Vinci y allí enlazar con la primera cigüeña hacia París.
-En tu nuevo estado no te conviene viajar, recuerda que llevas una bella ragazza en tu interior... -Francesca me sonrió con una ternura blanquísima lejana a la cursilería...
En casa de los abuelos recogimos a Paolo. Allí, todos nos encadenamos en un abrazo emotivo. Nuestro hijo le regaló un beso dulce y tibio a Francesca y ella no se pudo contener y derramó de nuevo (esta vez con una mansedumbre consciente) sus perlas de agua, densas, pulposas, prietas, deleitándose por el momento. El abuelo -el padre de Francesca- sacó una botella de amaretto y brindamos solemnemente todos por el devenir.
Mientras caminábamos despaciosamente por la Via San Giovanni in Laterano, embriagados en una aura de nostalgia empalagosa, Paolo daba saltos a nuestro alrededor como el caballo de un tiovivo de feria. Sus ojitos vivarachos no podían demorar su entusiasmo. Colocamos al piccolo entre los dos y le dimos la mano para sujetar un poco (con riendas invisibles) su euforia. Era imposible. Un puro nervio, un atado de nervios. Al llegar a la Basílica de San Giovanni, Francesca, se adelantó y entró a rezar una oración por el desarrollo y la evolución normal del embrión. Devota, la vi arrodillarse sobre el reclinatorio, frente al Pantocrátor móvil del altar, llevaba un respetuoso pañuelo que cubría su cabeza, susurraba con perdigones de fe unas jaculatorias que realzaban sus labios en la belleza. Francesca, iluminada por unos cirios encendidos que trémulos ardían, estaba tan hermosa… como todo aquel arte antiguo que adornaba la chiesa, y… mucho más. Allí, genuflexionada por su ferviente creencia, la miré con ojos laicos y pensé barnizado de lujuria que no existía en el mundo catálogo iconográfico de vírgenes o santos que la superara en hermosura. Al salir..., cuando el imperioso sol se derramaba abrasador sobre nuestras cabezas, mientras se quitaba el pañuelo, me hizo una pregunta académica:
-¿Sabías que esta Basílica fue fundada por el Papa Melquiades en el siglo IV?
-Pues..., no.
De vez en cuando le salía su ramalazo de historiadora del arte. Trabajaba en Tivoli, en un pequeño Instituto de Secundaria a 31 km. de la Ciudad de las Siete Colinas, Roma, donde vivíamos. Allí, en Tivoli, era muy querida por sus alumnos. Tenía como código deontológico no suspender a nadie; y cuando alguna vez lo hacía... mostraba su originaria testuz etrusca. Las excursiones obligatorias a la Galleria Borghese, Museo Nazionale Romano, Museo Nacionale di Castel Sant´Angelo, Museo della Cività Romana y la Galleria Nazionale d´Arte Moderna les encantaban a sus pupilos. Para los alumnos, salir de las aulas era una liberación. Y aprendían mucho. Más por el magnetismo que irradiaba la magistral Francesca que por visitar y ver el arte en directo. La adoraban...
La parada del autobús que estaba al otro lado de la Via de la Spezia le desperezó la idea de la mente de Francesca trasformándola en palabras.
-¡Ese autobús nos llevará sobre ruedas a la Piazza Colonna!
-¿Qué hay allí de original? -le pregunté intrigado.
-Unos grandes almacenes. Le compraremos al bebé que va a nacer su primer regalo -sus ojos glaucos reverdecieron más si cabe y emitieron destellos dorados y jaspeados provocados por el implacable sol del mediodía, también por su voluntariosa emoción contenida.
Llegamos a La Rinascente, el más grande de los almacenes comerciales de Roma. No se podía dar un paso y para avanzar teníamos que regatear como si fuéramos habilidosos delanteros de la Squadra Azzurra. Subimos los tres por las escaleras mecánicas hasta la primera planta; atacamos la sección de ropa infantil por el centro, sin contemplaciones; ya dentro del área pequeña, Francesca compró unos calzines rosas. Ella quería un ricordi de ese día tan maravilloso en el que su expectativa, su proyección, por fin se vería completada. Aquellos diminutos calcetines rosas parecían de muñeca de juguete. Francesca aseguraba que sería una niña. Y nos mirábamos cómplices. Y nos entrecruzábamos los dedos con dúctil presión. Y amábamos esos instantes deliciosos. Y cándidos, sonreíamos por todo...
Nos fuimos a seguir celebrándolo en el Sabatini in Trastevere, uno de los mejores restaurantes de la ciudad. Pedimos pizza napolitana y un caldo italiano de la mejor calidad, el Torre Ercolana y dicharacheros hablábamos hasta la extenuación. Paolo devoró su pizza y su zumo de naranja en un santiamén, como si no hubiera comido desde la decadencia del imperio.
Por la tarde estuvimos paseando serenamente por la Piazza del Popolo, cruzamos por el Ponte Margherita un río Tevere de aguas densas que tomaban la tonalidad del mercurio, nos besamos decenas de veces bajo un sol de membrillo, hacíamos cosquillas a Paolo sobre sus costillas, deseábamos seguir paseando la felicidad del instante y elegimos como trasporte un autobús que nos llevó hasta la Città del Vaticano. Allí, Francesca se extendió dándome explicaciones sobre la Columnata de Bernini y el Obelisco de Fontana en la Plaza de San Pedro; continuó hablándome atropelladamente de la Basílica de Miguel Ángel... Yo tenía sed de ella, una sed de universo: la deseaba.
-¿No podríamos hablar de algún artista contemporáneo..., que no haya fallecido? –disimulé.
-Si quieres... -y apremiante...-. ¡Era, era un decir, hombre! -Francesca me regaló otra peculiar sonrisa de su gama. Sus labios afrutados invitaban al beso más apasionado.
Francesca se acarició el vientre. Meditabunda en la inquietud... empezó a morderse las uñas...
-¡Así empezó la Venus de Milo! –me aventuré a decirle... expectante.
Su risa versátil fue prístina, sonrosada, azulona, hermosa como el mejor de los amaneceres romanos.
Aquella noche estuvimos en la Fontana di Trevi embelesados con el medallón de la luna llena y el rumor del agua en cascada. Tiramos unas monedas a la fuente mentando el futuro próximo mientras Paolo mojaba la yema de sus deditos introduciéndolos en el agua cristalina para recuperar aquellas monedas de la suerte depositadas al fondo, como en un ánfora. Estuvimos en la Piazza Navona y en la Piazza Spagna; en ésta última pedimos a uno de los numerosos artistas que había en la escalinata que nos hiciera una caricatura de Francesca. El piccolo Paolo se enfadó mucho, decía que su madre no tenía los labios tan grandes como en el dibujo a carboncillo. Después nos fuimos a la Stazione de Termini. Nos sentamos los tres en un banco, a ver pasar el tiempo. Teníamos los pies hinchados de tanto andar todo el día. Francesca se quitó los zapatos con una sensualidad ecléctica. Me enseñó con gesto consternado sus doloridos pies. Los tomé con ambas manos, almohadillándoselos de erotismo.
- Con esos pies tan inflamados puedes dormir de pie que no te caerás.
El bambino estalló con una risa contagiosa que se encaramó con el eco hasta la bóveda de la estación. Nuestras risas también eran incontenibles...
Llegamos al hogar y los tres brindamos con un gran vaso humeante de leche desnatada. Aquella noche dormimos los tres como benditos, protegidos por una benefactora luz de acuario que nos hacía soñar con peces que tenían la silueta de la bondad.
Tanta felicidad le parecía a Francesca <
-Quisiera saber... -conminó Francesca-, si nacerá sano.
-Puedes estar tranquila..., está muy bien formado.
Exhalamos un suspiro de alivio. Pero fue a partir de aquel día que las cosas empezaron a cambiar, a emborronarse. Por las noches Francesca se quejaba de un dolor agudo y pertinaz que no la dejaba dormir. La quinta noche de insomnio y dolor tuvimos que ir a Urgencias. El bambino estaba adormilado sobre mis brazos en la Sala de Espera cuando oí gritar a Francesca.
-¡No ven que estoy encinta!
Había salido encrespada de una dependencia de Rayos X. Querían hacerle una radiografía y podían dañar al ser vivo que albergaba balanceándose en el mar de placenta. Menos mal que Francesca era una mujer despierta que se enfrentó a aquellos médicos principiantes y aviesos de protocolo. Es verdad que después nos pidieron disculpas. Pero estuvieron <> de propiciar un error irreversible. Luego le hicieron un chequeo general y no detectaron nada maligno...
Durante tres semanas más Francesca tuvo malestar. Según ella no era insufrible. Se podía soportar. Mi esposa abnegada, al principio, no dejó las clases, a pesar de los contratiempos. Yo estaba muy intranquilo y le consulté telefónicamente mi preocupación a la Doctora Giulia. Nos citó al día siguiente en su consultorio. Frente a una nueva ecografía, la doctora, nos aseguró que no detectaba ningún síntoma que alterara la evolución normal del embarazo y que para más tranquilidad nuestra fuéramos a visitar a un amigo suyo que era una eminencia y Presidente de no sé qué Asociación Médica de la CEE. El eminente doctor le hizo a Francesca una Resonancia Magnética y no detectó nada ni en aquel complejo mecanismo ni en los análisis de sangre y de orina. Yo, aún así, no estaba satisfecho...
Nos marchamos cabizbajos. Ella ya no hablaba con aquel potente chorro de voz que tenía. Ni de Borromini (que fue su tesis doctoral). Ni de Miguel Ángel. Ni de Bernini, su ídolo. Su atroz silencio me dejaba con un vacío espectral. Eso era preocupante, y la incertidumbre volaba en la atmósfera que nos rodeaba como un enjambre de abejorros irritantes...
Un amigo del trabajo me recomendó el Hospital del Santo Spirito. Fuimos a regañadientes. Un médico especialista decidió hacerle un completo Scanner. Detectó camuflado un bulto a la altura del esófago. Le hicieron una biopsia. Las dos semanas que tardaron en darnos los resultados fueron un insondable pandemonio.
Cuando nos dieron el fatal diagnóstico nos hundimos como dos piedras plomizas en el fondo del océano; cien abismos mareantes se nos abrían como lo hacen las alas de los pájaros vultúridos al iniciar el vuelo cuando han detectado la carroña.
-No se preocupen -dijo el médico especialista-. Con la quimioterapia tal vez lleguemos a tiempo...
-¿Afectaría al bebé? -preguntó Francesca.
-Efectivamente. Tendrá que perderlo.
-¡Eso nunca, doctor! ¡Nunca!
El calendario goteaba más allá del cuarto mes de embarazo. Intenté persuadirla. Le dije que más adelante podríamos tener otro hijo, cuando superáramos las diatribas del trauma. Ninguna de mis palabras inversemblantes abatiría su férreo sentimiento. Sólo conseguía ofenderla y ofuscarla. Yo..., yo no quería perderla. La amaba, la deseaba… hasta el egoísmo más supremo. Pero su decisión fue inapelable. Indiscutible. Inalienable. Definitiva. Dramática.
Francesca se balanceaba en la mecedora con una tristeza silenciosa, honda, de pozo. Había solicitado al Instituto una excedencia que podía ser eterna. Ella sabía que el bambino y yo también estábamos abatidos como dos escenarios que se derrumban en la escenificación de La Vida. Yo la miraba de soslayo. Ella, con toda su dignidad floreciendo, intentaba levantarnos la moral...
-¿Sabías que Leonardo da Vinci tardó en pintar la Mona Lisa cuatro años?
-Pues..., no.
-¿Sabías que la sonrisa enigmática de la Gioconda procedía de una parálisis facial de la modelo que posaba? -la modulación de su voz era sobrecogedora, provenía de la caverna de los sueños frustrados.
-Pues..., no.
Pero la verdad es que en sus palabras se dirimía la pena y ya no sonreíamos como antes... la felicidad es efímera como las estrellas fugaces.
Gordezuelos, gotearon los agónicos meses... ¡con tanta tristeza solidificada! Francesca acertó en su pronóstico del sexo. Era una hembra que ya en las ecografías finales nos parecía hermosa como un guernica. Llegó el día de la alumbración. Fue un parto natural. Sin anestesia. Con gritos mudos. La niña nació sana. Con tres quilos setecientos cincuenta gramos. La bautizamos y la registramos con el nombre de Francesca, igual que su madre. Sólo un mes le dio de mamar de aquellas fuentes enormes que encendían mi pasión. Luego empezamos con las sesiones de quimioterapia. Francesca perdió el cabello, desmejoró físicamente, se abandonó a la corriente… Ya era tarde para resurrecciones. Excesivamente tarde. Su decisión, desempedrada de egoísmos, fue la de abrir paso a una nueva generación. A costa de su vida. En los últimos momentos, esqueleto y piel, yo le hubiera hecho el amor, dulcemente, deseaba trasmitírselo de viva voz, pero ya no oía, como no oyen las Madonnas de las grandes obras de arte las plegarias de los pobres. Su decisión valiente, amable, generosa, fue la de una auténtica mater, latina y universal.
Francesca-hija es un retrato en pequeño de su madre, una escultura, un cuadro, un reflejo. Tan linda como ella. Tan generosa como ella. Tan bondadosa como ella... Paolo la venera como a una madonna minúscula. Mi hija es..., ¿cómo decirlo?, dulce como la caña de azúcar natural en los inviernos crudos o la miel natural en los veranos abrasadores. Pero..., ¿cómo decirlo sin ofender?, ¡Dios mío!, ¿cómo decirlo?, mi camera è troppo fredda sin Francesca.
-Ciao, amada, siempre te querré...
*PRIMER PREMIO EN EL IX CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*PRIMER PREMIO EN EL VII CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*PRIMER PREMIO EN EL XI CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*PRIMER PREMIO EN EL XII CONCURSO LITERARIO SECCIÓN INTERNACIONAL <
*PRIMER PREMIO EN EL V CERTAMEN LITERARIO NACIONAL <
*PRIMER PREMIO EN EL I CERTAMEN INTERNACIONAL DE CUENTOS BREVES <
*PRIMER PREMIO EN EL XXVIII CONCURSO LITERARIO NACIONAL DE CUENTOS <
*PRIMER PREMIO EN EL I CERTAMEN INTERNACIONAL DE RELATOS BREVES “QUIXOTADAS, 2005”. EDITORIAL Edición Personal. MAYO DE 2005. MADRID.
*PRIMER PREMIO EN EL IV CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL <
*PRIMER PREMIO EN EL III CERTAMEN NACIONAL DE RELATOS BREVES “AMAPU, 2005”. JUNIO DE 2005. ALCOBENDAS. MADRID.
*PRIMER PREMIO EN EL V CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*PRIMER PREMIO EN EL V Y X CERTAMEN LITERARIO <
*PRIMER PREMIO EN EL I CONCURSO LITERARIO <
* PRIMER PREMIO EN EL XX CERTAMEN LITERARIO NACIONAL DE NARRATIVA DE <
* PRIMER PREMIO EN EL XXIV CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA DE ÁMBITO NACIONAL <
* PRIMER PREMIO EN LA VI EDICIÓN DEL CERTAMEN LITERARIO NACIONAL DE NARRATIVA <
* PRIMER PREMIO EX-AEQUO EN LA II EDICIÓN DEL CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA EN CASTELLANO <
* PRIMER PREMIO DE NARRATIVA EN CASTELLANO, PREMIO LITERARIO <
* PRIMER PREMIO DE RELATO EN EL CONCURSO “VERANO EXPRÉS”. 15 DE AGOSTO DE 2005. PERIÓDICO: LA VOZ DE GALICIA.
*PRIMER PREMIO EN EL I CERTAMEN INTERNACIONAL DE RELATOS BREVES <
*PREMIO EXTRAORDINARIO DE CUENTO HIPERBREVE DE LA DEL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*PRIMER PREMIO EN EL II CERTAMEN INTERNACIONAL DE RELATOS BREVES <
* PREMIO AL CONTENIDO HISTÓRICO: CAPÍTULO EL SEGLE XIX. LES REVOLUCIONS POLÍTIQUES. PUBLICACIÓN OCTUBRE 2005. HOSPITALET. BARCELONA. GENERALITAT DE CATALUNYA.
SEGUNDO PREMIO EN EL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*SEGUNDO PREMIO EN EL III CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS BREVES <
*SEGUNDO PREMIO EN EL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*SEGUNDO PREMIO EN EL CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA DEL COLEGIO DE DOCTORES Y LICENCIADOS DE VALENCIA. ABRIL DE 1998. VALENCIA.
*SEGUNDO PREMIO EN EL VII CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*SEGUNDO PREMIO EN EL I CERTAMEN LITERARIO <
*TERCER PREMIO EN EL IV CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE NARRATIVA: CUENTOS DEL MAR; <
*TERCER PREMIO EN EL III Y V CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*TERCER PREMIO DEL XIX PREMIO LITERARIO DE NARRATIVA <
*FINALISTA DE NOVELA EN EL XLV PREMIO <
*FINALISTA DE NOVELA, XXVIII CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*FINALISTA EN EL CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO <
*FINALISTA/GANADOR EN EL CERTAMEN INTERNACIONAL DE RELATOS DE LITERATURA ONÍRICA <
*FINALISTA EN EL XI CERTAMEN LITERARIO DE CUENTOS <
*FINALISTA EN EL XXI CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <<ÁLVAREZ TENDERO>>. JULIO DE 2007. ARJONA. JAÉN.
*FINALISTA EN EL XII CERTAMEN LITERARIO DE CUENTOS <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE VIVENCIAS <
*FINALISTA EN EL II CERTAMEN LITERARIO NACIONAL DE CUENTOS <
*FINALISTA EN EL III CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*FINALISTA, MENCIÓN HONORÍFICA EN EL II CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS DE VIAJES <
*FINALISTA EN EL XLVIII Y LI CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS <
*MENCIÓN ESPECIAL DEL JURADO EN EL CERTAMEN LITERARIO NACIONAL DE CUENTOS <
*FINALISTA DEL V CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*FINALISTA DEL IX, XVI Y DEL XVII CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO <
*ÁCCESIT EN EL IV CERTAMEN LITERARIO<
*ÁCCESIT EN EL IV CERTAMEN LITERARIO<
*FINALISTA DEL IV CERTAMEN LITERARIO <
*FINALISTA DEL XII Y XIII CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE NARRATIVA <
*FINALISTA DEL I CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL DE CUENTOS “RODEO DE PALABRAS”; PUBLICACIÓN EN LA REVISTA CULTURAL DEL DOMINICAL DEL PERIÓDICO “EXPRESO”. FEBRERO DE 2007. MÉXICO.
*FINALISTA DEL II CERTAMEN LITERARIO DE CUENTOS “EDITORIAL ÁBACO”. PUBLICACIÓN DEL CUENTO EN OBRA CONJUNTA. ENERO DE 2OO7. ALCALÁ DE HENARES. MADRID.
*FINALISTA DEL CERTAMEN LITERAIO <
*FINALISTA DEL I Y II CERTAMEN LITERARIO DE MICRORRELATOS <
*FINALISTA DEL XVI CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL "Los Cuentos de la Granja" (CON 2 RELATOS BREVES PUBLICADOS EN OBRA CONJUNTA). ASOCIACIÓN CULTURAL CANÓNIGOS. ENERO DE 1999. SAN ILDEFONSO. SEGOVIA.
*FINALISTA DEL III, IV, V Y VII CERTAMEN LITERARIO INTERNACIONAL <
*FINALISTA DEL XV CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA EN CASTELLANO <
*FINALISTA DEL XXI, XXII (2 RELATOS), Y XXV CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA EN CASTELLANO <
*FINALISTA (ÁCCESIT) DEL CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA EN CASTELLANO <
*MENCION ESPECIAL DEL XVII PREMIO LITERARIO DE NARRATIVA <
*SEGUNDA MENCIÓN ESPECIAL DEL PREMIO LITERARIO DE CUENTOS ERÓTICOS <
*FINALISTA (MENCIÓN ESPECIAL) DEL XX PREMIO LITERARIO DE NARRATIVA <
*FINALISTA DEL II CERTAMEN LITERARIO DE MICRORRELATOS EN INTERNET <
*FINALISTA EN EL I CERTAMEN LITERARIO DE MICRORRELATOS <
*FINALISTA DEL 4º CERTAMEN LITERARIO DE INTERNET Misescritos.com/ar. ABRIL DE 2005. BUENOS AIRES (ARGENTINA).
*SEMI-FINALISTA DEL LICEO INTERNACIONAL DE CULTURA E.E.U.U. PREMIO LITERARIO DE ÁMBITO INTERNACIONAL <
*PUBLICACIÓN EN LA REVISTA DEL DOMINICAL DE El País DEL CUENTO TITULADO “Viaje Interior”. JULIO DE 2003.
PUBLICACIÓN EN LA REVISTA DEL SEMANAL DE La Voz de Galicia DE LOS 3 CUENTOS FINALISTAS EL. 8 de AGOSTO DE 2005 y el 11 de AGOSTO 2005.
*MENCIÓN DE HONOR EN EL CERTAMEN LITERARIO DEL PROGRAMA DE LA RADIO “PUNTO LIBRO”, CADENA SER. EMISIÓN POR ANTENA. MARZO DE 2006. MADRID.
*ÁCCESIT EN EL I CERTAMEN LITERARIO <
*FINALISTA DEL II CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*SELECCIONADO Y PUBLICADO EN EL CONCURSO DE MICRORRELATOS “LOS LIBROS” DE LA REVISTA VITELA. BIBLIOTECA PÚBLICA BARTOLOMÉ J. GALLARDO. BADAJOZ.
*FINALISTA DEL I CERTAMEN LITERARIO DE NARRATIVA <
*FINALISTA DEL CERTAMEN DE MICRORRELATOS “ESCRISTORES.CL”, 2005. CHILE.
*FINALISTA DEL I CERTAMEN DE RELATO HIPERBREVE “FUFOSA” CON DOS MICRORRELATOS. MARZO DE 2007. SEVA. BARCELONA.
*FINALISTA/GANADORES DEL III CERTAMEN DE CUENTO FANTÁSTICO <
*FINALISTA DE NOVELA, XXXVIII CERTAMEN LITERARIO NACIONAL <
*MIEMBRO DEL JURADO DEL PREMIO LITERARIO DE CUENTOS <
1 comentario:
Bueno, Ginés, contigo no tengo palabras. A parte de que tu relato fue de los que me gustó desde un principio, al ver tu biobibliografía, uf, se queda uno empequeñecido...
Gracias por participar, enhorabuena por el premio y, al igual que al resto de los concursantes, te invito a que sigas enviando relatos para ser publicados en el blog y compartidos por esta pequeña gran comunidad.
Recibe un cordial saludo, Juana.
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